Me había enterado de casualidad que este lunes, iba a estar en el lugar donde estudié, donde trabajo, donde pasé los últimos 30 años de mi vida.
Que Luis se presentara ahí, era para mí como si me avisaran que se aparecería de improviso en el living de mi casa.
Que Luis se presentara ahí, era para mí como si me avisaran que se aparecería de improviso en el living de mi casa.
Hubiera querido sacudir el polvo y pasar el trapo, pero era imposible (quien conozca Exactas, con su fachada gris y su polvo de años sabrá a qué me refiero).
Al menos intenté verme presentable, y recibirlo con mi mejor sonrisa. No era la primera vez que me lo encontraba, pero sí la primera vez que nos encontrábamos fuera de un ámbito de libros y lecturas infantiles.
Al menos intenté verme presentable, y recibirlo con mi mejor sonrisa. No era la primera vez que me lo encontraba, pero sí la primera vez que nos encontrábamos fuera de un ámbito de libros y lecturas infantiles.
Por si alguien no lo conoce, Luis Pescetti es un escritor, músico, compositor argentino muy premiado, y reconocido por el público de todas las edades. Nacido en San Jorge, provincia de Santa Fé, ha recorrido mundo, cantando y contando. Ha recibido numerosos reconocimientos: un Grammy en 2010, el Konex como reconocimiento 2001-2010, el premio Casa de las Américas en 1997, y mucho más.
Para mí, Luis fue uno de los primeros autores que me decidió a mediar entre lecturas y lectores. Sus libros estaban entre los favoritos de mis hijos, y me regalaron los primeros cuentos que decidí salir a contar a otros. Nadie te creería, Historia de los Señores Moc y Poc, El pulpo está crudo, y luego Caperucita Roja tal como se la contaron a Jorge o Unidos contra drácula, fueron los libros que necesité compartir por el placer que a mí me habían regalado.
Para que otros puedan disfrutar un poco de sus palabras, me animo a compartir estos apuntes que he tomado ayer (curiosamente no es la primera vez que tomo apuntes en el aula 6).
Así nos invitaba a encontrarnos desde su página:
(lo estuvieron grabando, y luego de que se publicara esto, publicaron una parte de la charla así que se los agrego al final..)
Llegué un rato antes de las 13.30 y el aula estaba bastante vacía.
Sin embargo, de a poco fue llenándose de un público variado. Maestras del Jardín, jóvenes estudiantes que salían de sus aulas, padres que trabajaban en Ciudad, y gente "de afuera" que se había enterado y quería escucharlo.
Adultos, en su mayoría, como pueden ver:
Adultos, en su mayoría, como pueden ver:
El aula tiene una capacidad de 240 personas (lo sé porque el sábado tomaremos el parcial ahí). Aunque al comenzar parecía vacía, al finalizar estaba a tope, calculo más de 300 personas. Gente de pie o sentada en las escaleras del costado, nadie quería perderse ese encuentro.
Una de las primeras bromas fue por la puerta vaivén hacía un chirrido molesto cada vez que alguien la abría, así que pidió que la dejaran abierta. Durante toda la charla la gente siguió entrando, y con naturalidad sentándose a escuchar.
En la presentación contaron que el Jardín Materno Infantil que hay en Ciudad Universitaria, para los hijos de trabajadores o estudiantes de Exactas, lo invitó hace dos años a Luis a inaugurar su biblioteca. La biblioteca de Mi pequeño mundo ya tiene más de 3000 ejemplares y fue bautizada con su nombre (recuerdo con tristeza, esa visita de Luis, a la que no pude asistir).
Este año, al planificar el proyecto anual, pensaron en el tema del juego, y volvieron a invitarlo
Así nos participaban del germen de esta charla. En primera fila estaban justamente las maestras y auxiliares, con su delantal azul que decía Exactas,
Este año, al planificar el proyecto anual, pensaron en el tema del juego, y volvieron a invitarlo
Así nos participaban del germen de esta charla. En primera fila estaban justamente las maestras y auxiliares, con su delantal azul que decía Exactas,
Luis, lucía distendido y relajado, sabía que estaba ante un público distinto a los de sus show, pero se dispuso a jugar con los participantes adultos...
"Una vez me preguntaron ¿Cómo enseñarles a perder a los chicos?.
¡Hay que ser latinoamericano! Si estuvieras en Japón, en Alemania o en EEUU, te preguntarías como enseñarles a ganar."
Y siguió...
"Los chicos son marcianos."
(y ante la risa generalizada agregó)
"Lo digo en serio...¿Cómo trabajar con chicos?
(y ante la risa generalizada agregó)
"Lo digo en serio...¿Cómo trabajar con chicos?
Piensen en que necesitarían ustedes si fueran marcianos...
El problema es que cuesta mucho imaginarse a uno en otro tiempo. Nosotros no entendemos a los chicos y ellos no entienden como serán en su vida adulta.
Si querés trabajar con un chico y entender su experiencia, imaginate a vos mismo como migrante."
Luis nos habló de su experiencia, como maestro, como animador de juegos infantiles, pero fundamentalmente de su experiencia como comunicador durante sus show en el teatro.
Luis conoce muy bien a los chicos, pero no los imita, no se pone a la par, sino que los acompaña desde su rol de adulto.
Luis conoce muy bien a los chicos, pero no los imita, no se pone a la par, sino que los acompaña desde su rol de adulto.
Decía:
" Yo no entronizo al niño...
A los niños no les gusta que los pongamos a cargo de las cosas....
Imaginensé que se suben a un avión, y les dicen: Volemos...¿quién quiere ser piloto?. ¿Quién quiere ser cirujano? El adulto debe conservar su rol de adulto, porque sino el chico se angustia mucho."
En este momento las risas que aguardaban, se desataron.
En toda la charla recurrió al humor, pero a diferencia de sus espectáculos, nos lo hizo notar en cada paso, por qué y cómo lo hacía. Nos indicó el sendero y nos acompañó a caminarlo.
En toda la charla recurrió al humor, pero a diferencia de sus espectáculos, nos lo hizo notar en cada paso, por qué y cómo lo hacía. Nos indicó el sendero y nos acompañó a caminarlo.
Era como estar en un teatro, pero mirando el backstage, mostrándonos los hilos que mueven el detrás de escena y que tuvo la generosidad de compartirnos.
Como en una clase.
Como en una clase.
Contaba que cuando escribió su libro "Taller de animación musical y juego", preguntó a maestros y profesores de los juegos que hacían. Que hoy en día, recurre a youtube, para buscar chistes, juegos ( "de cada 100 chistes que miro, 1 es bueno") para sus espectáculos. Claro todo el trabajo previo que se pone en marcha antes de presentarse con su banda en el teatro. La estructura del guión, nada de improvisación. La charla también tenía el suyo, que iba mirando cada tanto...
"Los juegos son como los chismes, cuando un chisme está bueno te morís de ganas de llegar al trabajo para contarlo. Lo mismo un chiste. Lo mismo una canción.
Si a mi me divierte va a funcionar."
La frase que sigue la subrayé varias veces en mi libreta de apuntes...
La frase que sigue la subrayé varias veces en mi libreta de apuntes...
"Los chicos son detectores de entusiasmo."
Contó, entonces, como va alternando en su espectáculo, distintos momentos.
Si enseña un juego que es de coordinación, lo alterna con otro más sencillo:
Si enseña un juego que es de coordinación, lo alterna con otro más sencillo:
"Los chicos tienen una predisposición natural para engancharse."
Y ahí, otra vez de a pie, bajándose del personaje, nos contó que intercala chistes en sus show porque tiene pánico al fracaso. La respuesta a esa confesión fue la risa generalizada, pero el contraatacó..."ustedes se ríen, pero mi analista me cobra" .
Y poniéndose serio:
Y poniéndose serio:
"No hay que hacer muchos chistes porque sino se piensan que soy un cancherito y a los chicos no les gusta, es como si les preguntara todo el tiempo si me están siguiendo. Los chicos me dirían:
- No me preguntés, no estés sujeto a mi opinión, "
En este momento de la charla ya no recordaba que esperaba encontrar en ella, pero estaba segura que no era eso.
Me resultó inesperada, profunda, interesante y como docente sentí que me hablaba.
"Lo mío es más fácil"...nos decía.
Repito sus palabras, dirigidas a nosotros, docentes:
"Si yo tuviera 500 personas, una sola vez, y 500 personas al otro día, me la banco. Tengo dos show. Esas misma 500 personas al otro día entro en pánico. Cuarto día: tengo un artista invitado. Quinto día: hago un encuentro de artistas invitados....
La docencia tiene algo terriblemente difícil que es mantener la frescura de la relación durante 4 horas o más, durante todo el año.
Hay un exceso de supervisión...todos opinan...los padres, los directivos... Ahí está nuestra tarea como docentes, para tener la suficiente autonomía profesional.
Esa es la fuerza del docente, esa es la habilidad...
En eso se parecen, aunque lo mío es más fácil: 500 personas una sola vez."
Nos contó como en sus show el equilibra, lo que da y lo que pide.
Si les da una parte, una canción conocida que ya están esperando...(por ejemplo su clásico Tiburón, tiburón) les pide, que escuchen una canción nueva, algo a estrenar...(nos cantó un pedacito de una canción nueva, lenta, más profunda...tierna)
Da y pide. De eso se trata.
Si les da una parte, una canción conocida que ya están esperando...(por ejemplo su clásico Tiburón, tiburón) les pide, que escuchen una canción nueva, algo a estrenar...(nos cantó un pedacito de una canción nueva, lenta, más profunda...tierna)
Da y pide. De eso se trata.
"Para un espectáculo necesita un guión y un margen de juego. No hay que forzar las cosas. Sino es el caminar de los borrachos. Nadie camina tan duro como un borracho."
Cierto, no podemos controlar todo.
Y ahí me acordé de las clases en que con los adolescentes me pongo demasiado rígida...hay que saber guardar el rol, pero ser flexible.
Ahí nos contó un tip que le pasó un gerente de Sony, ese canal que es un éxito con sus sitcom...
"Tenés que tener un chiste inolvidable, 5 que estén buenos... y los demás que acompañen."
Y acá agregó que le parecía una fórmula ideal y efectiva, hasta en la convivencia...
La verdad que Luis es un gran observador, de la gente, y de los chicos, me quedé pensando en esto luego de que nos diera este ejemplo para entender mejor el mundo infantil.
- Los chicos no conocen la narrativa de las cosas. - nos decía.
El ejemplo que mencionó me resultó muy claro; el vaso y la botella.
Un niño intentará probar que se hace con el vaso, que se hace con la botella. No sabe que hay que levantar la botella, acercar el vaso, inclinar un poco la botella, pero no mucho...luego sostener el vaso...y así.
Solo lo intenta, a veces con resultados desastrosos...
Y claro:
"La narrativa se aprende después"
Me tuve que ir un rato antes (había que continuar con las clases, pero juro que me quedé pensando en sus palabras y con la ansiedad de probarlas).
Cuando me iba, nos mostraba un video de una especialista de los Estados Unidos, que hablaba de las canciones de cuna.
De lo importante que es componer canciones de cuna para relacionarse con un niño, con nuestros hijos.
No importa si no tiene una bella voz, o si no sabe cantar...un niño solo espera esa voz conocida y bebe de esas palabras para calmar su sed de amor y de compañía.
Entre los extras que nos dio la charla, fue a Luis acompañado de su guitarra cantándonos algunos pedacitos de la canciones que estrenó el día anterior en su show.
Cuando me fui, me las llevé conmigo, y al finalizar el día, les compartí a mis alumnos de 2do año de secundaria este cuento: Deme otro, que está en su libro Nadie te creería.
Mañana, me toca tomar parcial en esa aula, esta vez, a adultos que cursan biología en la Universidad de Buenos Aires.
Algo de la magia de Luis, se habrá quedado flotando ahí, al menos para mí.
Me voy a aguantar, y no les voy a cantar "Soy invisible" una de las canciones favoritas...(un poema que está en el libro Unidos contra Drácula)
Pero se las dejo a ustedes...
Porque habla de la importancia de escuchar a los niños, (los padres, los docentes, los adultos en general) para que no haya niños invisibles.
Eso que hace tan bien Luis.
(para mis amigos de afuera, que por ahí no lo conocen aún, o no tienen acceso a sus libros, mucho de Luis está acá...
en toda su generosidad, accesible...
http://www.luispescetti.com/)
El link para escuchar parte de la charla
https://www.youtube.com/watch?v=G3aoCCZrEe0&feature=share
Cierto, no podemos controlar todo.
Y ahí me acordé de las clases en que con los adolescentes me pongo demasiado rígida...hay que saber guardar el rol, pero ser flexible.
Ahí nos contó un tip que le pasó un gerente de Sony, ese canal que es un éxito con sus sitcom...
"Tenés que tener un chiste inolvidable, 5 que estén buenos... y los demás que acompañen."
Y acá agregó que le parecía una fórmula ideal y efectiva, hasta en la convivencia...
La verdad que Luis es un gran observador, de la gente, y de los chicos, me quedé pensando en esto luego de que nos diera este ejemplo para entender mejor el mundo infantil.
- Los chicos no conocen la narrativa de las cosas. - nos decía.
El ejemplo que mencionó me resultó muy claro; el vaso y la botella.
Un niño intentará probar que se hace con el vaso, que se hace con la botella. No sabe que hay que levantar la botella, acercar el vaso, inclinar un poco la botella, pero no mucho...luego sostener el vaso...y así.
Solo lo intenta, a veces con resultados desastrosos...
Y claro:
"La narrativa se aprende después"
Me tuve que ir un rato antes (había que continuar con las clases, pero juro que me quedé pensando en sus palabras y con la ansiedad de probarlas).
Cuando me iba, nos mostraba un video de una especialista de los Estados Unidos, que hablaba de las canciones de cuna.
De lo importante que es componer canciones de cuna para relacionarse con un niño, con nuestros hijos.
No importa si no tiene una bella voz, o si no sabe cantar...un niño solo espera esa voz conocida y bebe de esas palabras para calmar su sed de amor y de compañía.
Entre los extras que nos dio la charla, fue a Luis acompañado de su guitarra cantándonos algunos pedacitos de la canciones que estrenó el día anterior en su show.
Cuando me fui, me las llevé conmigo, y al finalizar el día, les compartí a mis alumnos de 2do año de secundaria este cuento: Deme otro, que está en su libro Nadie te creería.
Mañana, me toca tomar parcial en esa aula, esta vez, a adultos que cursan biología en la Universidad de Buenos Aires.
Algo de la magia de Luis, se habrá quedado flotando ahí, al menos para mí.
Me voy a aguantar, y no les voy a cantar "Soy invisible" una de las canciones favoritas...(un poema que está en el libro Unidos contra Drácula)
Pero se las dejo a ustedes...
Porque habla de la importancia de escuchar a los niños, (los padres, los docentes, los adultos en general) para que no haya niños invisibles.
Eso que hace tan bien Luis.
(para mis amigos de afuera, que por ahí no lo conocen aún, o no tienen acceso a sus libros, mucho de Luis está acá...
en toda su generosidad, accesible...
http://www.luispescetti.com/)
El link para escuchar parte de la charla
https://www.youtube.com/watch?v=G3aoCCZrEe0&feature=share
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