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martes, 13 de febrero de 2018

Leyendo 2018: Las cenizas de papá

 
Título: Las cenizas de papá
Autora: Graciela Cabal
Editorial Norma . Colección La otra orilla

Hace mucho que quería leerlo...desde que lei "Secretos de familia" un libro que deseé mucho y que nunca dejo de leer.

Graciela Cabal, escritora argentina, es un imprescindible de cualquier biblioteca

Como en "Secretos de familia" este libro que es un clásico de la misma autora, el libro tiene parte de su vida. En este caso de su vida adulta en una historia más corta, y más personal, pero con el mismo humor.

Y además con ese decir de ella que te hace pensar y que te sirve como para reconciliarte con la vida
"Me dan lástima las personas que no son yo. Pensar que se van a morir sin ser yo. Pobre gente.

Todo el tiempo soy feliz. Aunque esté triste, ¿se entiende?

Pero a veces soy tan feliz, que la felicidad no me deja respirar.

Esa felicidad que no me deja respirar y hace que tenga que cerrar los ojos y apretar las manos me agarra en oleadas y sin que yo sepa como

Cuando me está por venir, me doy cuenta. Algo así como un aviso: ahi viene, ahi viene, ahi viene...¡Y llega!

Pero después se va. Y no de a poco, de repente: plop

- A mí nunca me pasó eso.

- ¿Ves? por eso me dan lástima las personas que no son yo. No saben lo que se pierden"

Graciela trata la vida cotidiana, con humor, pero nos hace de espejo, nos obliga a mirarnos como mujer, como madre, como mujeresmadrestrabajadoras. Graciela es una autora feminista, y eso se nota en sus libros. Una adelantada, siempre.


 Varios capítulos desopilantes hablan de eso. Como este titulado :  "La máquina de escribir"..que arranca así:
"Son las siete de la tarde.
Las nenas, tomando baños de vapor.
Pablo, escribiendo en su pared con marcadores.
El puchero, derramándose en la olla
Los pañales, en el tendedero de la cocina
La mesa, ocupada con las galeras de Sueños y realidades, que debo entregar mañana
Lli, comiéndose mis pantuflas.
Daniel, ausente.
Mi novela, durmiendo el sueño eterno en el cajón.
Son la siete de la tarde.
Hora de pensar en el divorcio."

El capítulo titulado : "Adolescentes" ,  (¡Oh Dios!, ¡tengo dos en casa!) no tiene desperdicio, cualquiera que esté conviviendo con uno tiene la obligación de leerlo

Este libro se publicó en 2004, año de su fallecimiento. Se lee por tanto de otra manera el capítulo "Vejez y vida sana" en donde Graciela a punto de cumplir 60 piensa en que quisiera vivir 120 años...y nos da indicaciones para hacerlo, o el último capítulo 

"El ciprés funerario (instrucciones para mi muerte"
"El tema es que si me entierran lejos, ¿quién va a ir a ponerme flores y a lustrar las placas? (las placas con fotos de Jaro, de mi primer libro, a los veinte años, no olvidar) ¿Y los homenajes públicos, eh, los días de mi nacimiento, de mi merte, del día del escritor, de mi santo (el 18 de agosto, Virgen de la Gracias, que nadie se haga el distraído)? Hay que pensar en todo. Y no dejar nada librado al azar...
...
Pero bueno, a mí nunca me gustó molestar Y quiero que me recuerden con una sonrisa (tampoco con una carcajada, si alguien llora, se lo voy a agradecer) Y que nadie diga: "¡Oh, no, hoy es el cumpleaños de la escritora - o de la tatarabuela-! ¿A quién le toca llevar las flores y lustrar la placa?"...

Quisiera compartirles todo el libro pero es imposible. Es tan corto...que solo queda la opción de releerlo, para no dejarlo ir.

Lo recorrí entero entre que tomé la decisión de ir a la presentación de un libro (si...sali un poco más tarde) y la estación Medrano del subte B. Casi me paso  y debo culpar a Graciela que me riera a carcajadas y el tipo de la camisa abierta adelante mío me mirara raro (y yo no pude menos que mirarle el ombligo)

El título hace referencia a su papá, que siempre amenazaba morirse hasta que al fin lo consiguió, y también a su último cigarrillo que Graciela le ofreció en su cama de hospital...cenizas...Si uno lo lee como continuación del otro libro entiende mucho más, pero sino se disfruta, pero no como un refresco de verano que pasa y saca la sed, es más como una sopa caliente, que se te queda adentro...tan necesario que nutre y alimenta

Un agradecimiento especial a Mabby Torres que fue la que me lo regaló


Pueden encargarlo en este sitio:ventalibros@gracielacabal.com

domingo, 28 de enero de 2018

Lecturas encontradas: Mujercitas ¿eran las de antes? y otros escritos.


 

 "Mujercitas ¿eran las de antes? y otros escritos

(el sexismo en los libros para niños)
Editorial Sudamericana


Volver a pensar/se, releer a escritoras que nos marcan un camino por el que no se debe dejar de transitar para pensar la Literatura.

Y acá estamos leyendo a Graciela Cabal
Obra publicada en 1992 y republicada en 1998
 
Y una se pregunta...¿cuánto avanzamos desde entonces?
Algunos apuntes extraidos del libro que necesito compartir;

"Los libros para chicos abundan en textos discriminatorios respecto a la mujer. Y el sexismo, ya lo sabemos, es una de las peores y más toleradas formas del autoritarismo"

  En el capítulo titulado "Las chicas buenas van al cielo" Graciela nos habla de la gran ilustradora Adela Turín (autora de Arturo y Clementina, Rosa Caramelo, parte de una serie titulada "A favor de las niñas" y una pionera en llevar la temática de género a los libros infantiles)

"Refiriéndose a las ilustraciones de los libros infantiles Adela Turín advierte que en general, las madres nunca llevan anteojos. Es comprensible. Los anteojos se usan para leer; tienen que ver, de alguna manera con la inteligencia, por eso los que llevan anteojos son los padres, los abuelos, son hombres en general. También pueden llevar anteojos algunas mujeres un poco locas, y por que no decirlo: solteras"
En este mismo capítulo titulado justamente "A favor de las niñas"  nos habla de la literatura infantil:

...volvamos a la literatura argentina infantil, cosa de mujeres.
¿Cosa de mujeres? ¿Como los chupetes anatómicos, las cacerolas engrasadas y el crochet? ¿Es posible que la misma fatalidad sexual que nos condena a ser las mejores en esto de rasquetear pisos, desodorizar inodoros, freir milanesas y, por que no, destapar cañerias, nos vuelva especialmente aptas para la literatura infantil?

...
En el mejor de los casos se trataría de una tarea menor que, por lo oscura y descalificada, tiene algo de trabajo doméstico y un no se qué de apostolado"

En la parte final del libro titulada "Palabra de Bruja" Graciela Cabal se pregunta sobre el rol de las mujeres en la literatura
(al leerlo sentía que dialogaba con Marina Colasanti, autora que también estaba leyendo y que se preguntaba lo mismo en su libro "Fragatas para tierras lejanas Conferencias sobre literatura")
Dice Graciela:
En primer lugar quiero decir que soy feminista. Y no digo "soy feminista pero no de esas que enarbolan el corpi...", "ni feminista, pero tengo una hermosa fami..." Soy feminista desde que era así de chica. Y punto.

En segundo lugar: de un texto literario me importa su calidad, no el sexo del que la o lo escribió. 

Tercero. creo que sí existe una literatura de mujeres (evito usar el término "femenino", tan torpemente zarandeado y tan cargado de significaciones masculina que se ha vuelto engañoso). Hablo de la literatura con marcas específicas, que aborda temáticas propias del género, que intenta volver a nombrar lo ya nombrado o bautizar lo que no tiene nombre...

Cuarto (y fundamental): como narradora, no me propongo dejar un mensaje feminista (ningún mensaje pretendo dejar) ni esclarecer a las mujeres ni nada que se le parezca. Escribo porque me gusta, porque es lo que sé hacer. Escribo para conjurar la muerte. Y ni siquiera escribo lo que quiero: escribo lo que puedo..."

Graciela Cabal es una escritora muy querida, que nació en 1939 y nos abandonó en 2004, dejando a muchos de sus lectores en estado de desamparo. Publicó al menos 40 libros. Entre ellos Secreto de Familia que recibió el premio especial Ricardo Rojas en 1989.
 "Secreto de Familia" es una novela con toques autobiográficos contada por una niña. Es también un historia contada con un humor desopilante, (de las pocas novelas que al leerla logran que me ría a carcajadas) Hace varios años que lo comparto con mis alumnos para plantearnos esas cuestiones de género, y otras, acerca de lo femenino, que tan bien retrata Graciela en su libro.

También recomiendo sus libros de colecciones infantiles como "Las Rositas", o "La pandilla del ángel", y toda ella por supuesto.