"La búsqueda
del lenguaje". Experiencias de transmisión" de Ángela Pradelli.
Ya había leido otros libros de la misma colección, conocía a la autora...No iba con la intención de buscarlo, porque no lo conocía pero me encontró.
"¿Qué significa leer? ¿Por qué escribimos? ¿Todos podemos hacerlo?..."
Estas preguntas en la contratapa me interesaron, porque son parte de una búsqueda...
Me había encantado "El sentido de la lectura" en la misma colección y sabía que Ángela no me iba a defraudar
Así fue...
Lo devoré, me devoró, me hizo emocionar, me hizo pensar
Habla del lenguaje, de la lectura, de la escritura, pero sobre todo es una narración desde su experiencia en la enseñanza y por eso me gusta. Y me toca, en este momento en que siento que a veces la enseñanza es acompañar al otro a remar, aunque no haya agua.
Lo leí con prisa, pero con pausas. Cuando alguna parte me golpeaba duro, directo al corazón y me hacía desbordar de sentimientos ...paraba.
Acá va una...
Cuenta de una escritora que conoció en el Congreso Internacional de Escritoras en Rosario...y lo que ella contó
"...Yuyiko Kato, a su turno, se refirió a las campesinas chinas, mujeres a las que se le tenía prohibido aprender a leer y escribir. Campesinas, que privadas de educación y sometidas a la autoridad del hombre, crearon a principios del siglo XVIII un idiioma secreto, el nushu, para poder expresarse. Imposibilitadas de escribir, plasmaron los caracteres en los bordados que realizaban en las mangas de los kimonos, en los abanicos. También en las prendas que formaban el ajuar de las novias, dejaron boradada de caligrafía indescifrable para los que no conocían el nushu. Si se piensa que, en silencio, en secreto, las mujeres analfabetas. en el ámbito más doméstico crearon un lenguaje propio que incluía alrededor de dos mil palabras, no puede dejar de valorarse la dimensión de la necesidad de expresarse, de afirmarse y trasmitir a través de la escritura. Así, las campesinas chinas inventaron una lengua con la que escribieron sus historias, canciones y consejos para las recién casadas en el único campo que les estaba permitido hacerlo, el bordado de telas. El nushu se trasmitió de madras a hijas durante muchas generaciones y recién desapareció hace unos pocos meses, a mediado de 2004, cuando murió Yang Huanyi, la última mujer que lo había aprendidoAntes de morir, había querido enseñarle a sus hijas pero ninguna de ellas quiso aprenderlo."
Me pareció muy fuerte
Y al terminar de leerlo
Se me apareció la imagen de una ancianita japonesa, pequeña y encorvada que muere abriendo enormemente su boca para hacernos oir su grito sordo y congelado...buscando transmitirnos sus últimas palabras, que solo ella conoce...
Realmente era un libro que necesitaba, es por eso que salió a encontrarme
"La escritura, la ajena pero la propia también, nos interpela y nos cuestiona. Y si bien el lenguaje, ese misterio insondable, no nos evita el dolor, si nos ayuda a ponerle palabras a nuestras tragedias, a defendernos, a elaborar el sufrimiento, a construir nuestros duelos, a imaginar el futuro", nos dice
Creo que pensé en esto la primera vez que me encontré con los chicos del secundario, hace unas semanas atrás.
No nos conocíamos, me habían pedido que reemplazara a una docente que faltaba hace semanas pero no sabía ni siquiera que tema estaban viendo, ni cual era el programa, ni lo que se esperaba de ellos o de mí.
Les pedí que escribieran...que se presentaran en pocas líneas a través de su objeto más preciado.
Ahora que leo los escritos después de conocerlos un poco más, me sorprendo.
Aparecieron sus sentimientos, su ternura, sus deseos, sus profundos amores de 13 años...
Tanto de ellos en pocos renglones, más de lo que pudieron decirme con horas de palabras...
Hay que darles la oportunidad de escribir...y fundamentalmente, de leer y ser leidos por otro.
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