sábado, 26 de febrero de 2022

Leyendo aulas: Leer con jóvenes, leer con adolescentes.

Me han pedido varias veces recomendaciones de lectura que puedan compartir con adolescentes.

Quizás no puedo recomendarles qué leer, pero puedo decirles, que he leído con ellxs. 

Más aún, puedo decirles que he llevado a mis clases y ellxs me han pedido seguir leyendo.

Dice Liliana Bodoc: 

"Exactamente igual que en un relato para adultos, si pretendemos que la literatura juvenil sea eficiente en este cometido debemos pararnos en el extremo opuesto a la obviedad, al panfleto. Y crear textos con espacios abiertos para la vacilación y la duda. En literatura, la contundencia del contenido solo se logra por la contundencia de la propuesta estética..."


Con esa idea en mente de ir a la búsqueda de una propuesta estética y alejarme de la obviedad. De pensar en interpelarlxs, sorprenderlxs, buscar a ese otro/otra,  cada año en clase de Biología leemos literatura. Porque me resulta necesario (no con el objetivo de conectar con temas de biología,  pero sí se da bienvenido sea, les cuento más de esto en otra entrada).

No es fácil porque también leemos otras cosas como libros de textos, artículos de ciencia y también explicamos, debatimos, escribimos, y cumplimos con jornadas y actividades del calendario escolar.

Así que como solo tengo 3 horas de clase por semana de 40 minutos (con suerte) debo escoger textos cortos: cuentos, poemas y novelas breves. 

Les comparto algunas, intentando seleccionar mostrando alguna variedad:


 "Qué blanca más bonita soy" publicado por Lóguez, (trad de Rodrigo Martínez).

 Es una novela de Dolf Verroen, un autor holandés, (la tapa es de un autor también muy querido Wolf Erlbruch)  que ha recibido varios premios y que desde su publicación en 2007 no ha perdido actualidad.

María en su doceavo cumpleaños, recibe de regalo de cumpleaños un esclavo, llamado Koko. 

Un obsequio que recibe agradecida, y que deberá aprender a controlar a pedido de su madre. Mientras intenta crecer y convertirse en mujer.


Una novela que se cuenta en apenas 40 capítulos, muy breves (muchos de menos de una página), pero de temas que suscitan debates profundos. El racismo, la esclavitud, la diferencia de clases, las cuestiones de género, la violencia, los mandatos. 

Cada vez que leemos una parte, o toda (el año pasado la leímos completa en voz alta en varias clases) surgen conversaciones e intercambios. El año pasado por ejemplo, mis estudiantes no le perdonaban a los adultos el trato que recibía Koko, pero sí excusaban a María. Lo que derivó en interesantes conversaciones en el aula.

Esta novela, generó una muestra de ilustradorxs en el  taller de Mónica Weiss, que pueden visitar, dado que es una muestra virtual . Creo que la relación con el trabajo artístico les permitirá enriquecer su propuesta en el aula.

En mi caso, el tema de la existencia de razas lo debatimos desde la perspectiva biológica (en humanos no se aplica el concepto de "razas", aunque si podríamos emplearlo para referirnos a otros animales).Es por ello que compartimos en clase un texto de Alberto Kornbhlitt,   "La humanidad del genoma" libro de la colección Ciencia que Ladra de editorial Siglo XXI.  Pudimos encuadrarlo dentro de la unidad de genética, y conversar de otros temas que se ligan a esto.

Pero muchas veces como les digo, no hay una motivación biológica sino una intensión de belleza, de puro disfrute, o hasta de remover la monotonía del aula.

Es por eso que la oportunidad de compartir poesía, nos ocurre casi a diario  (lxs invito a ver mi proyecto "poesía para llevar"). Podría comentarles de varios libros de poemas que disfrutamos, pero voy a hablarles en especial de uno.


"Tus ojos" es un poemario de Eduardo Abel Gimenez, ilustrado por Cecilia Afonso Estevez. La propuesta estética, les interesa de inmediato. Este juego de formas y espacios, los invita a curiosear. Los poemas pueden también utilizarse como disparadores de la escritura (así lo hemos hecho en algunos talleres pero fuera de la clase de biología). 

Publicado por Calibroscopio. Es ya un clásico que se comparte y disfruta en cada actividad poética.

Les dejo un par de poemas de muestra:

Tus ojos son
como la suma de otros ojos,
como la diferencia entre otros ojos,
como mis ojos
pero sin la tristeza.

.............................................

Tus ojos son
como hablar de pronto
un idioma nuevo,
como subir por la escalera
hasta la altura de los satélites,
como pegar un salto
hacia el otro lado del mar,
como contar las estrellas
con los dedos de una mano,
como cavar en una noche
hasta el centro del mundo.


"Secretos de familia" , publicado por Sudamericana, en 1995. De la autora argentina Graciela Cabal. Me acompaña desde hace varios años.

En primera persona una niña relata su vida cotidiana en la década del ´50. El colegio, la familia, el sufragio femenino, la vida en el matrimonio, son algunos de los temas que aparecen. En tono humorístico, con tintes autobiográficos, que utiliza Graciela nos moviliza y divierte. 

Ahora hay una nueva edición publicada por Edhasa (que hasta llegó en el plan de lectura a las escuelas de CABA), pero en esta edición  la foto de portada es la autora niña con sus padres. Acá cuenta un poco de esto.

En las páginas se habla del abuso, la violencia, la primera menstruación, los roles de género, el comienzo del sufragio femenino, la educación, contado desde los ojos de Gracielita, en capítulos que resultan hilarantes. En mi caso puedo compartir los capítulos por separado, y aún así comprenderse el contexto y lo que cuentan. Les dejo un ejemplo: en este video la autora nos cuenta su capítulo 20.  


Leer libros álbum con adolescentes no es algo , que ocurra frecuentemente en la escuela secundaria. Sin embargo, he comprobado que les aporta muchísimos beneficios. Es una lectura corta, que les resulta atractiva, aún a lxs poco lectores, permite que en un taller de dos horas, escojan distintas lecturas,   y a su vez se habilita interesantes conversaciones. Suelo armar en el año algún taller sólo dedicado a compartir libros álbum (en general enfocado al tema de Educación Sexual Integral), pero también suelo introducirlos diario en mis clases.

La niña de rojo, Ilustrada por Roberto Innocenti, y con textos de Aaron Frisch, publicado por Kalandraka, es un favorito que se trasciende edades.

Una versión de caperucita roja en la gran ciudad, sometida  a los peligros y emociones en un bosque de marquesinas, centros comerciales y edificios de departamentos. Expuesta a la violencia y al peligro. Un libro que se puede leer a distintas edades, pero que  les aseguro no deja indiferente. 

Recuerdo especialmente un taller que hicimos hace un tiempo en ocasión de una Jornada en la escuela. Luego de esta lectura, una estudiante se animó a contarnos situaciones de acoso en la calle que la incomodaban y esto dio pie a muchas aportaciones de sus compañeras sobre su propia inseguridad .

Pueden escuchar y ver una versión acá


Creo que leer en el aula, debe realizarse en distintos formatos (audio, video, texto), géneros y posibilidades Es muy común que digamos que "no quieren leer", quizás no les interesa lo que les proponemos por lo que es nuestro objetivo buscar otras lecturas.

"El hilo invisible de la naturaleza" . Publicado por Libros del zorro rojo, con textos de Gianumberto Accinelli e Ilustraciones de Serena Viola (Traducido por Elena del Amo) es un estupendo libro informativo.

En mi caso, que enseño ecología, cada historia tiene relación directa con los contenidos de mi materia. ¿Cómo se relaciona una polilla sudamericana con un cactus en Australia?, o ¿cómo el DDT (un veneno muy poderoso) puede producir la caída de techos en una isla del Caribe?. Suelo comenzar las clases  leyendo una de las historias, ofreciéndoles que elijan un título del índice. Suele ser el gancho necesario, porque después quieren que sigamos con otros. 

En la heterogeneidad del aula, suele haber alumnos y/o alumnas que no se interesan por las novelas o cuentos, pero que se sienten curiosos a explorar estos textos.

Les dejo uno de los capítulos que compartí con mis estudiantes en audio en plena pandemia, se llama "Una plaga de largas orejas" 

Algunos de los capítulos más pedidos se titulan:
  • Una mariposa salva Australia
  • El hotel de las ranas
  • Operación Cat Drop: llueven gatos
  • De cometas, mares y pulpos inteligentes.

En cada caso, en un estilo literario se cuentan historias reales, en dónde la introducción de una especie modifica ese delicado equilibrio que ocurre en los ecosistemas, o un organismo produce cambios inesperados, e impredecibles.



"Un sonido atronador" es un cuento de Ray Bradbury. En este caso les muestro esta hermosa edición de Nórdica Libros, con traducción de Elena Ferrándix. (pero también fue publicado en antologías de Bradbury, creo que está en "Las doradas manzanas del sol" con el título de "El sonido del trueno", o "El ruido del trueno").

Cuenta la historia de un cazador que tiene la oportunidad de viajar al pasado para traerse la presa más impresionante, un dinosaurio T. Rex. La única condición es que no puede salirse del camino, ni cambiar nada, porque podría modificar el futuro.

 Seguramente, aunque no lo hayan leído, la historia les suena. O habrán escuchado hablar del efecto mariposa, de algún modo está relacionado con este cuento. En mi caso lo he leído en escuelas primarias, explorando el género de Ciencia Ficción, y hermanado con el capítulo de Los Simpson, (donde Homero viaja en el tiempo gracias a una tostadora)

Con los mayores, en clase de biología, podemos relacionarlo con la teoría de la evolución que postularon Gould y Eldrege. 

Se que hay una película que no ví, y numerosas seríes y lecturas que se conectan.

Aclaro que esto no pretende ser un recorrido, ni un mapa, simplemente una selección que abra territorios sin explorar, o sume a los que ya han transitado. 

"Claro que la literatura infantil y juvenil puede acompañar a iluminar el crecimiento, pero para eso , igual que un buen amigo, debe poner la maravillosa complejidad del amor sobre la superficialidad de al condescendecia. La literatura infantil y juvenil debe "problematizar al lector"." (2) 

Dice Liliana Bodoc, y creo que estos textos de una forma u otra lo logran.

Gracias por acompañar, lxs espero en comentarios.


(1) (2) El fomento del libro y la lectura/11. Propuestas y reflexiones 2009-2010. FMG. 2011. p107 y 108


Extra:
Les menciono otros libros que suelen acompañarme  al aula

- El mar y la serpiente de Paula Bombara (no lo he leído completo por razones de tiempo pero todos los años leemos los primeros capítulos, y las repercusiones son muy bellas)
- Poesía de Wislawa Szymborska , de Mary Oliver, de Mario Benedetti, de Laura Devetach ("Para que sepan de mí" por ejemplo es un clásico)
- Libros álbum muchos. Intentaré hacer un posteo aparte.
- "Yo nena , yo princesa ". Otro libro que compartí por capítulos. De Gabriela Mansilla sobre la historia de Luana, la primera niña trans en obtener legalmente su DNI con su nombre escogido en Argentina. El año pasado se estreno la película que se basa en él.
- Hay muchos textos cortos que me acompañan hace tiempo, algunos los pueden ver  en este sitio



martes, 8 de febrero de 2022

Leyendo mujeres: Anna Ajmátova


 Anna Ajmátova, nació un 23 de junio en Odessa y murió en las afueras de Moscú, el 5 de marzo de 1966. Empezó a escribir poemas a los 11 años, y vivió en pleno régimen estalinista siendo perseguida y  acallada. Su primer esposo fue acusado de conspiración y asesinado. Su hijo estuvo encarcelado numerosas veces y su último marido, Nikolai Punin, murió en un campo de concentración. Ella continuó escribiendo y no solo eso, sino dando voz al pueblo mediante sus poemas.

Tuvo una vida intensa. En su juventud fue retratada por Modigliani.




Conoció a muchos artistas y creativos, pero su vida estuvo signada por la pobreza y la enfermedad. Por la pérdida de sus seres queridos.

Una poeta que hay que conocer y leer. En Argentina la editorial Llanten publicó recientemente sus poemas, "Detrás de mi marchan millones" traducidos por Natalia Litvinova, poeta nacida en Bielorrusia y llegada a Buenos Aires en su infancia.

En estos días cuando recién terminaba de leerla (y me la encontraba por todas partes) me crucé este texto de Juan Forn, en "El hombre que fue viernes" que me habló nuevamente de ella y que les comparto como una presentación de su vida.



La noche que empezó la Guerra Fría



Anna Ajmátova creyó hasta el día de su muerte que la Guerra Fría había empezado por su culpa, la noche del 25 de noviembre de 1945. Para Stalin, Ajmátova era una excrecencia del pasado prerrevolucionario, mitad monja, mitad puta en celo, y desde 1921 le tenía prohibido publicar sus poemas. Pero los soldados del Ejército Rojo se los sabían igual de memoria. Por esta razón, en los momentos más difíciles de la guerra, bajó desde el Soviet Supremo la orden de que Ajmátova recitara sus poemas por radio para levantar la moral de la nación. La guerra se ganó, los intelectuales evacuados de Lenningrado volvieron a ciudad en ruinas y, en noviembre de 1945, llegó a la URSS una comisión cultural británica cuyo velado propósito era sondear la actitud que tendría Stalin hacia sus aliados occidentales, con la guerra terminada. Entre los miembros de esa comisión había un joven profesor de Oxford, hijo de judíos rusos, que ya había cumplido funciones de inteligencia durante la guerra en la embajada británica en Washington. Su nombre era Isaiah Berlín y el mismísimo Winston Churchill lo había elegido para integrar la misión, por su conocimiento de la lengua y la mentalidad rusas, así como de los intereses geopolíticos ingleses.

Berlín pisaba por primera vez las calles de Petersburgo desde que había huido con sus padres de los bolcheviques, cuando tenía once años. Sus ojos y su corazón no daban abasto. No le importaban las ruinas; caminaba por las calles oyendo a la gente hablar en ruso a su alrededor y estaba en éxtasis. En el primer momento libre que tuvo se sumergió en una ruinosa librería de la Perspectiva Nevski donde supo, para su asombro, que la mítica Anna Ajmátova no sólo seguía con vida y residía en al ciudad sino que además estaría dispuesta a recibir su visita. Acompañado por uno de los fantasmales habitués de esa librería, el crítico Orlov, Berlín llegó esa tarde a la habitación sin gau y sin calefacción donde vivía Ajmátova, en el tercer piso del Palacio de al Fontannka, que había pertenecido en sus días de gloria a la poderosa familia Sheremetiev. Ya no había alfombras ni cortinados en al habitación de pintura descascarada; solo una mesa con dos sillas que no hacían juego, un viejo baúl contra la pared y un diván donde lo esperaba sentada la poeta, cubierta con un chal negro, como una reina trágica. Un único cuadro colgaba de las paredes desnudas: un retrato a lápiz que le había hecho Modigliani cuando ambos fueron amantes, en París , en 1917.

Berlín era el primer occidental que Ajmátova veía en veinticinco años. Además podía hablar con él en ruso, y además pudo por fin enterarse a través de él del destino de todos aquellos amigos exiliados en Londres y París a partir del 1917. En esos veinticinco años, Ajmátova había aprendido a soportarlo todo: la tuberculosis, la indigencia, el fusilamiento de su primer marido, el tifus, la deportación de su segundo marido y de su único hijo, la deshonra pública, el hambre, la sucesiva inmolación de casi todos su amigos poetas (desde Blok y Maiacovski hasta Mandelstam y Tsveátieva). La suma de esas penurias la había llevado a escribir.: “Fue la ´época que sólo los muertos podían sonreír, felices de descansar al fin.”

A esa altura de su vida, después de haber sido el amor prohibido de todos los rusos, Ajmátova se había convertido en la madre sufriente de todos ellos. El casto Berlín (que más tarde confesaría que seguía siendo virgen por entonces) le dio la oportunidad de volver a ser, por una noche al menos, simplemente una mujer, y ella le abrió su corazón. Le contó cada detalle de su vida, le habló de sus amores y sus muertos, le recitó los estremecedores poemas de Réquiem y le confesó que luego de hacerlos memorizar a siete personas de su máxima confianza, procedía a quemar los papeles donde los había escrito. Ningún ruso cree hasta el día de hoy que Berlín y Ajmátova pasarán toda la noche sentados en sillas enfrentadas, como lo relató él más tarde. Si le creen, en cambio, que cuando se levantó para irse ya había amanecido y que volvió caminando hasta el hotel en trance, sin reparar en la llovizna que le calaba los huesos, ignorando aún que acababa de iniciarse la Guerra Fría en el mundo.

Porque he aquí que, la tarde anterior, Randolph Churchill, el hijo de Winston, que formaba aparte de la comitiva británica y había sido compañero de Berlin en Oxford, necesitó alguien confiable que lo ayudara a comprar caviar en Leningrado, y no tuvo mejor idea que hacerse llevar hasta el deteriorado Palacio de la Fontannka, donde se puso a llamar a gritos a Berlin desde la calle. Este bajó a toda velocidad, se lo llevó consigo a buscar el dichoso caviar, volvió cautelosamente a lo de Ajmaótva con la caída de al noche y permaneció allí hasta la mañana siguiente. Para entonces ya se había puesto en movimiento la omnímoda maquinaria de delación soviética que haría llegar a oídos de Stalin que Winston Churchill había enviado a su propio hijo y aun traídos judío en una operación de espionaje para llevarse a esa puta vieja de Ajmátova a Occidente.

Para entonces la comitiva histórica ya había abandonado la URSS, de manera que Berlin y Chrchill se salvaron de será arrestados. Las consecuencias las sufrieron los demás: Berlin había logrado ver en Leningrado a su tío Leo, un hermano de su padres que no había querido irse de la URSS y era profesor titular de medicina en la universidad. En los días siguientes a la apartida de su sobrino, Leo fue acusado de entregar a extranjeros información sobre la salud de Stalin, obligado bajo tortura a reconocer su culpabilidad y enviado a prisión (con la muerte de Stalin sería liberado , pero a los pocos días de volver a Leningrado, aún débil y sin trabajo, se cruzó en una esquina con uno de sus torturadores y murió de un síncope en plena calle). Para Ajmátova, ls cosas no fueron mejores. Su hijo Lev, que después de pasar diez años en el gulav otros tres combatiendo a los nazis gozaba por entonces de sus primeros meses de libertad, fue otra vez deportado a Siberia. Y la propia Ajmátova fue públicamente crucificada por el comisario cultural Zdhanov en la primera plana de Izvestia, cosa que le hizo perder la magra pensión que cobraba y la habitación en el Fontannka.

Hasta la muerte de Stalin en 1953, Ajmátova pidió en vano por su hijo y vivió de la caridad de los pocos amigos que se atrevían a cuidarla. El deshielo de Kruschev traería la tardía liberación de su hijo Lev y un reconocimiento igualmente tardío para ella: se la autorizó a publicar, se le concedió una pequeña dacha en Komanvovo, se le permitió viajar a Oxford y a Roma a recibir premio. En Roma recitó famosamente para las cámaras su Poema sin Héroe, escrito luego de la partida de Berlin, donde dice de él: “No será mi esposo ni mi amante/pero juntos haremos algo/que trastrocará el Siglo Vente”. En Oxford, aceptó que Berlin la agasajara con un banquete en la mansión de su esposa millonaria, sin dirigirle la palabra a la anfitriona en toda la velada. Al día siguiente, en la universidad cuando llegó al momento culminante del recitado de su extraordinario Réquiem, alzó los ojos a hacia su amante platónico y pronunció en ruso aquellas palabras (“No lo sabes per has sido perdonado”) que, según aseguran todos las que la conocieron, resume a la perfección lo que sentía al estar en su presencia. (1)


En toda su poesía hay una fuerza, y a la vez una sensibilidad. La conocí a través de este poema de Réquiem:


En lugar del prefacio

En los terribles años de Yezhov estuve parada en la fila, durante
diecisiete meses, frente a las cárceles de Leningrado.
Una vez alguien me reconoció. La mujer de labios azules que
estaba detrás,
y que seguramente nunca había oído mi nombre,
recobrándose del entumecimiento tan común para todas nosotras,
me susurró al oído (allí hablábamos todas en voz baja)
—¿Y esto, usted puede escribirlo?
Y yo contesté:
— Puedo.
Entonces algo como una sonrisa rozó
aquello que alguna vez había sido su rostro.


1 de abril de 1957
Leningrado

Les dejo alguna selección (muy personal) de sus poemas.

Me lanzaron tantas piedras
que ya no les tengo miedo.
La trampa se convirtió en una torre,
la más alta entre las altas.
Agradezco a los constructores,
espero que sus preocupaciones y tristezas pasen.
Desde acá puedo ver antes el amanecer
y celebro el último rayo del sol.
Por la ventana de mi habitación
entran los vientos de los mares del norte
y una paloma come el trigo de mis manos...
Y esta página inconclusa,
divina, tranquila y sencilla,
la terminará de escribir
la morena mano de la Musa.

1914

Le pregunté al cuco
cuántos años viviré.
Las cimas de los pinos temblaron.
Un rayo cayó sobre la hierba.
Pero ni un sonido en la espesura...
Regreso a casa
y el viento fresco acaricia
mi frente caliente

1919

Nunca me gustó
que sintieran lástima por mí.
Con tu gota de piedad
voy como si el sol estuviera en mi cuerpo.
Por eso resplandece alrededor.
Yo voy haciendo milagros.
¡Por eso!

1945



La victoria está ante nuestra puerta.
¡Cómo recibiremos a esta querida invitada?
Como las mujeres que levantan en alto a los niños
que se salvaron de mil muertes,
así la recibiremos

Natalia Litvinova en el prólogo del libro, termina con estas palabras:

"Anhelo que esta antología poética que traduje, les revele a ustedes, lectores y lectoras, las máscaras y pasiones de mi Anna y, como la apodó Tsvietáieva, de la Anna de todas las Rusias."

Les aseguro que van a querer tener con uds a Anna.


(1) En "El hombre que fue viernes". Juan Forn. Publicado por Página 12.

La ilustración de tapa del libro de Anna es de Gastón Malgieri



domingo, 6 de febrero de 2022

Leyendo mujeres: Liliana Bodoc





Foto del gran maestro Uri Gordon, que supo capturar perfectamente su magia. 


Liliana Chiavetta, conocida como Liliana Bodoc nació en Santa Fe un 21 de julio de 1958 y falleció en Mendoza un día como hoy de 2018. Fue una escritora y poeta argentina Estudió Licenciatura en Letras en la Universidad Nacional de Cuyo y ejerció como docente de Literatura Española y Argentina en diversos colegios de la misma universidad y se estableció en San Luis.

Bella y humilde, se nos fue demasiado pronto a los 59 años

Siempre dispuesta a tender la mano, cálida, amena, inteligente, combativa

Una persona que creía en eliminar las desigualdades, y lo proponía en cada charla, en cada acción.

Una escritora increíble, que empezó tarde en la escritura, recién a los 39 años publicó por primera vez (lo contaba tan lindo, tan humildemente, como fue que llegó ese original a ser un libro) La Saga de los confines . Creó un mundo, que tiene puntos de contacto con Tolkien (Tolkien y Le Guin, repetía eran quienes la habían inspirado), pero con mayor presencia femenina, más socialmente comprometido y abrevando de mitos y leyendas de las culturas originarias.

Esa trilogía le hubiera bastado para ocupar un lugar en la literatura argentina que nadie le podía discutir. Pero hubo más. Aún hoy algunos de sus escritos están saliendo a luz, como un poema "Formas de ver" recientemente publicado por Pez Menta, con ilustraciones Nadia Marchesini, que acaba de ser seleccionado por la Fundación Cuatro Gatos.


Palabras de Liliana Bodoc

Llega febrero, y un nuevo aniversario de su partida, es el momento de nuestro homenaje releyendo sus libros.


Le decían "la madre de los confines" porque fue la creadora de esta maravillosa "Saga de los Confines" (Los días del venado, Los días de la Sombra, Los días del Fuego), que dieron inicio a un universo nuevo, y su carrera como escritora.


Desde que nos dejó en una orfandad de nuevas historias, el 6 de febrero de 2018 , no hacemos más que extrañarla.


En esto de buscar sus libros, y ver videos de sus conferencias, me fui encontrando (re-encontrando) con algunas de sus palabras. La idea de esta entrada es conservarlas. Hacer que viajen de boca en boca.Que sus palabras nunca mueran.


Palabras sobre la memoria:

"Si hago memoria hago esperanza y justicia"

"Si hago memoria la soledad se extingue"

"La memoria es una casa donde cabemos todos".



En Los confines de la palabra. La memoria.


Sobre la poesía:

"La poesía es una conjetura acerca de lo inexplicable"

"La palabra poética no nos pone un uniforme más bien nos hace únicos"

"Una poesía es un silencio rodeado de palabras precisas"

"Los poetas hacen que el silencio diga lo que ellos tengan ganas de decir"


"La palabra poética será una balsa que nos mantenga en la superficie..."

¿Qué es un monstruo?
"Un monstruo socialmente hablando, no es un ser horripilante y feroz; es algo mucho más serio. Para las sociedades lo monstruoso es el otro. Es lo que interpela sus paradigmas y pone en jaque sus tabúes"


En " Los confines de la palabra. Lo poético.


Acerca de la literatura:


"Hay que darle arte literario a los niños para que aprendan a amar el arte literario para que se transformen en jóvenes y en adultos capaces de decodificar la estética literaria, es una cosa de primera necesidad."


Entrevista en la Facultad de Filosofía y Letras de UNCUYO.


"El arte es una cosa de conocer el mundo. Leer un cuento …Pensar artísticamente el mundo tiene que ver con una manera de conocerlo…"


"El cielo más útil es el cielo de los poetas…Cuando algo nos angustia, cuando el hijo …uno levanta los ojos no hacia el cielo de los físicos, sino hacia el cielos de los poetas."


“La literatura es el agua y el pan, absolutamente necesaria para entender el mundo en el que vivimos, el mundo en que transitamos para conocernos, es un puente hacia nosotros mismos es un puente hacia los otros. “


“A veces la ficción, nos puede ayudar a atravesar las tempestades más complicadas y las tormentas más difíciles. …hay un puente emocional que tiende la literatura en forma constante y permanente…”

En el Congreso de Literatura Infantil y Juvenil . Perú. 2014



 En Hasta Trilce, el teatro de la Ciudad de Buenos Aires, hay un cartel que la recuerda. Estuve ahí para ver la obra "El espejo africano" que representó la compañía Tres gatos locos (junto a mi amiga Patricia Domínguez y una amiga de ella, también sureña) en 2018. Ver ese cartel, para mí fue muy fuerte, porque fue en ese mismo lugar donde la conocí personalmente, varios años atrás en ocasión de un taller, ahí nos vimos un fin de semana en que ella nos recibía y nos contaba secretos sobre el oficio de escribir.



Agua

La lluvia es agua que saltó al abismo.
El mar es agua bravía.
El llanto es agua picante
si baja por tus mejillas.

Agua con hueso es el hielo.
Agua rota, la cascada
Agua obediente, el arroyo
que baja por las montañas.

¡Cuando el agua tiene sed
Desaparece la playa!

Liliana Bodoc .
 En Ondinas.


Casualmente cuando leía este libro, que me llegó en el 2020, su editora Violeta Noetinger, compartió conmigo una anécdota sobre Lili.

Me decía  de " Ondina" (un libro de cuentos, enlazados entre sí por el tema del agua), hizo un primer cuento, y al leerlo sentía que le faltaba algo, parte de su esencia. Se lo comentó, le dijo que faltaba la marca "Liliana". La respuesta de Lili fue que había recibido el comentario de un lector que decía que su estilo era muy enrevesado y que le costaba entenderlo. Es por eso que optó por un estilo más simple. Violeta le dijo "vos no escribís, para los lectores que te encuentran enrevesada. Esos no son tus lectores. Tu marca personal, lo que vos hacés como nadie, lo que te hace única y maravillosa, es esa poesía que metes en todo lo que hacés. No te traiciones, no abandones tu estilo". A partir de ahí se aflojó y los cuentos fluyeron.

Es efectivamente un libro poético, con su esencia.

Palabras de Liliana en sus libros:

«El mal, como planta que es, no se está quieto. Crece. Y si encuentra buena tierra, arma un zapallar en poco tiempo. El bien, si me permiten, es de esas plantas difíciles, que por cualquier motivo se secan o se pudren.»

Elisa, la rosa inesperada.

«Porque los espejos reflejan la historia de su tiempo. Y a veces, como los cristales curvos, la ensanchan, la adelgazan, la distorsionan. »

El espejo africano.


«Los cuentos nos ayudan a amar las cosas…»

En “Blanco”, cuento de Sucedió en colores.


«Esa mujer tenía la gracia de transformarlo todo en fábula. Esparcía pedregrullo sobre el piso de tierra, cubría los catres con mantas de colores. Colocaba a la vista la cafetera, la olla de hierro, las tres tazas de loza blanca; y cualquiera deseaba quedarse allí para siempre.»

Diciembre, Súper Álbum.

«Hay objetos que jamás nos pertenecen del todo. No importa que se trate de antiguas reliquias familiares, pasadas de mano en mano a través de las generaciones. No importa si los recibimos como regalo de cumpleaños o si pagamos por ellos una buena cantidad de dinero. Estos objetos guardan siempre un revés, una raíz que se extiende hacia otras realidades, un bolsillo secreto. Son objetos que no podemos limpiar ni entender. Objetos que se marchan cuando dormimos y regresan al amanecer...»

                 En el comienzo de El espejo africano.

«En esos tiempos, una isla era mucho más pequeña si nadie la habitaba. Cuando alguien llegaba, la isla se hacía grande.»

Los días de la sombra. Saga de los confines 2.

«A veces los cuentos son retazos y destellos de hechos ciertos. Contamos lo que ocurrió. Otras veces, los cuentos son pedazos de sueños. Contamos para que ocurra. »

El puente de Arena, cuento de "Amigos por el viento"

«Al día siguiente, R y D cruzaron juntos la verja del amanecer. Y jamás volvimos a tener noticias sobre ellos, porque las leyendas se detienen un paso antes del horizonte.»

En "Rojo". "Cuento de Sucedió en colores".


«A veces la vida se comporta como el viento: desordena y arrasa. Algo susurra, pero no se le entiende. A su paso todo peligra; incluso aquello que tiene raíces. Los edificios, por ejemplo. O las costumbres cotidianas.»

En "Amigos por el viento".

«El río, que pasa y se queda al mismo tiempo, arrastró el dolor pero conservó el recuerdo. »”

"El Río estuvo allí" (Historia de la desembocadura) en Ondinas

«Nací y crecí en un feroz desierto africano. Allí aprendí que el amor, como el agua, es un bien precioso. La verdadera riqueza no es poseer lo que sobra, sino lo que escasea..()..El amor escaso como el agua en el desierto, es el único tesoro que te hará dichosa.»

"Agua del desierto". En Ondinas.

«Desde la muerte de Shampalwe se había vuelto áspero y silencioso. Antes, decían de él que peleaba sin miedo a la muerte. Ahora se lamentaban de verlo pelear sin apego a la vida. »

Los días del venado.

«Según parece, hay dones para cada uno. Dicen que cada persona tiene el suyo, aunque a veces, no es fácil reconocerlo. »

El espejo africano.


Por último . Les quiero contar de un homenaje que hicimos en 2020. El 6 de febrero, nos reunimos algunas de las "Brujas Bucaneras" (un grupo de promoción de la lectura que formamos cientos de personas en varios sitios distintos, capitaneado por Barbi Couto) a homenajearla.

Llevé esta caja:


.. y escuchamos esta historia de "Los días del venado"

- ¡Aquí estamos por fin! -dijo Vieja Kush-. Quítense los mantos y vayan cerca del fuego. Yo voy a preparar agua de menta con miel para olvidar el frío. Dulkancellin colgaba su abrigo cuando vio la caja de madera labrada que aparecía con la lluvia y desaparecía con el sol. Sonrió para sí y levantó la voz hablándole a Kush, que trabajaba en el fuego:

- ¿Qué sacarás esta vez de tu baúl?

- ¡Quién puede saberlo! -respondió su madre.

- Ojalá saques el peine de Shampalwe -intervino Kuy-Kuyen -. Así nos cuentas, de nuevo, cómo fue su boda.

-No -dijo Thungür, frotándose las manos cerca del fuego-. Mejor que saque la piedra roja del volcán para que nos cuente del día que se abrió la tierra y los lagos tenían burbujas de calor.

- Sea lo que sea les contaré una historia…

Cada familia husihuilke conservaba un cofre, heredado por generaciones, que los mayores tenían consigo. Aunque tenía menos de dos palmos de altura, y un niño pequeño podía rodearlo con sus brazos, en él se guardaban recuerdos de todo lo importante que había ocurrido a la gente del linaje familiar a través del tiempo. Cuando llegaban las noches de contar historias, volteaban el cofre haciéndole dar cuatro tumbos completos: primero hacia delante, después hacia atrás y, finalmente, hacia cada costado. Entonces, el más anciano sacaba del cofre lo primero que su mano tocaba, sin vacilar ni elegir. Y aquel objeto, evocador de un recuerdo, le señalaba la historia que ese año debía relatar. A veces se trataba de hechos que no habían presenciado porque eran mucho más viejos que ellos mismos. Sin embargo, lo narraban con la nitidez del que estuvo allí. Y de la misma forma, se grababa en la memoria de quienes tendrían que contarlo años después. Los husihuilke decían que la Gran Sabiduría guiaba la mano del anciano para que su voz trajera desde la memoria todo aquello que era necesario volver a recordar. Algunas historias se repetían incansablemente. Algunas se relataban por única vez en el paso de una generación y otras historias, quizá, nunca serían contadas.

- Pienso en las viejas historias que quedaron para siempre dentro del cofre -dijo Thungür-. Si nadie las contó, nadie las oyó. Y si nadie las oyó…
-Nadie las recuerda -completó Kush, que llegaba con su vasija cargada de menta dulce-.
Siempre repites lo mismo y me obligas a repetir a mí. ¡Tantas veces te lo he dicho! Cuando algo ciertamente grande ocurre suelen ser muchos los ojos que lo ven. Y muchas las lenguas que saldrán a contarlo. Entonces, recuerda esto, las viejas historias que jamás se cuenten alrededor de un fuego, alrededor de otro se contarán. Y los recuerdos que un linaje ha perdido viven en las casas de otro linaje.”


La saga de los confines. I. Los días del venado.

Luego, cada una, sin mirar, puso su mano en la caja, y sacó las palabras de Liliana, que cuál oráculo se hicieron presentes. Fue muy revelador, porque lo que le tocó a cada una, hablaba de lo que era, y sí... fue parte de su magia.





Me despido otra vez con sus palabras, que me llegan como una despedida:

« Con la próxima lluvia me voy
aunque lloren
Con el próximo llanto me voy
aunque llueva. »

Y no podía faltar, ahora tan cerca del inicio de clases, sobre la educación...


Actualizo hoy 6/2/2022 nos volvimos a encontrar algunas Brujas Bucaneras y Ana Carolina López me regaló estos haikus de Liliana:

Señalo el Norte
con el pico del viento
para que exista el Sur

Y ahora vuelo
cuando mi cuerpo viejo
Ya no puede amar

En "Silfos" de la Serie Elementales


Links que utilicé: https://www.youtube.com/watch?v=pjKIve1svnQ&t=1330s En el encuentro de Literatura Fantástica de la Universidad de San Martín

Los confines de la palabra, lo poético: https://www.youtube.com/watch?v=JKvczu72ICg&t=418s

Los confines de la palabra, la memoria: https://www.youtube.com/watch?v=cm-qbTiN9Vo

(* Por si quieren saber más de la Brujas Bucaneras  https://www.facebook.com/brujasbucaneras/)

Les dejo un listado de los libros que menciono.

Amigos por el viento. Publicado por Alfaguara. Ilustraciones Poly Bernatene
Elisa la Rosa inesperada. Norma. Colección Zona Libre
Ondinas. Ilustración Johana Wilhelm Alfaguara
Sucedió en colores. Ilustraciones de Pablo Bernasconi. Alfaguara
El espejo africano.Ilustraciones de Mariana Chiesa.SM
La saga de los confines (Los días del Venado, Los días de la Sombra. Norma
Diciembre super álbum . Ilustraciones Oscar Senonez. Alfaguara